En un partido en el que terminó navegando en la intrascendencia, Atlético de Rafaela igualó sin goles ante Brown de Adrogué. El encuentro se disputó en la noche del lunes en el Monumental de

Alberdi, donde la Crema sólo pudo ganar un partido de 4 que jugó.

Atlético cumplió con la premisa que le ordenaba ser protagonista del partido, por historia, por localía, por obligaciones y por la exigencia de su gene. Pese a unos minutos iniciales en que Brown le discutió la posesión y la iniciativa, desde el vamos estuvo claro que la batuta del partido la manejaba el local.

La Crema apostaba a la capacidad de Portillo en el andarivel derecho, a los encuentros que podían gestarse por ese lado con Vidal y con la potencia ofensiva de Funez, apoyado en el abanico que hacía Fissore en la mitad del terreno, y esperando por las pinceladas de Galeano y Capurro.

El casi gol

A los diez minutos, una buena combinaciòn por derecha dejó a Patricio Vidal cara a cara con el arquero, desde ángulo cerrado, y Agüero respondó bien.

A los 15'llegó el segundo aviso de Atlético, cuando luego de una serie de toques dentro del área en el que intervinieron Funez, Vidal y Portillo, la pelota le quedó servida a Galeano en el borde izquierdo del área chica. Otra vez Agüero, con toda su humanidad, evitó el grito sagrado.

La tercera no fue la vencida. Sobre el filo de los 35', una buena corrida de Portillo terminó en los pies de Funez, que no terminó nunca de acomodarse en la medialuna. Al final remató Vidal y el disparo se fue apenas ancho.

Todo mal

El segundo tiempo mostró desde el arranque la disposición de los dirigidos por Medrán de monopolizar el control de las acciones. Y así fue. Sin embargo, salvo con un par de aproximaciones de Galeano, no volvió a inquietar en demasía a Agüero.

Los cambios no le dieron soluciones a Medrán. El equipo perdió la brújula, equivocó una y otra vez los caminos y se empecinó en los pelotazos frontales que le hicieron fácil el trabajo a los visitantes.

Al final sólo hubo silbidos y mucho fastidio entre los hinchas ante el rumbo confuso del equipo.