En septiembre pasado el Sindicato de Empleados y Obreros Municipales (SEOM) que conduce Darío Cocco realizó una asamblea en la que resolvió aprobar la escisión del gremio local -que nuclea a los empleados de 46 municipios y comunas de la región, incluidos Rafaela, Esperanza y San Vicente- de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales de Santa Fe (FESTRAM), sumándose a un paso que dieron también los sindicatos de Santa Fe capital y de Rosario.
Debilitada por esas bajas de los gremios más importantes en cuanto a número de afiliados, pero todavía representativa de los sindicatos de municipales de muchísimas localidades de 19 departamentos de la provincia, la FESTRAM sigue siendo la negociadora principal en la paritaria de los trabajadores del sector en la provincia y, de hecho, los incrementos que reciben los municipales jubilados dependen de lo que cierre FESTRAM a nivel provincial.
Al margen de eso, y mientras el SEOM, ASOEM y el STMR armaron una federación propia, la FESTRAM impulsa también la creación de sindicatos paralelos y esta interna no deja de repercutir en Rafaela, donde ya hubo serios conflictos. En ese contexto, la FESTRAM considera que dirigentes del SITRAM (el sindicato paralelo al SEOM que se formó en Rafaela) están siendo "perseguidos" por la administración local, y ese -entre otros- será uno de los temas convocantes de una conferencia de prensa prevista para este viernes en un hotel céntrico de la ciudad, adonde estarán numerosos dirigentes de la entidad provincial, encabezados por el titular de la entidad, Ignacio "Noni" Monzón, la secretaria adjunta Andrea Paz y el secretario de Administración y Actas, Germán Ocampo.
Escala la interna
Por otra parte, trascendió que este jueves se realizó una reunión de delegados del SEOM y que varios de ellos expresaron su malestar por la decisión del gobierno municipal -previamente acordada con el gremio- de liquidar el suelo de febrero en dos pagos, un 90% desde este mismo jueves y el resto a pagar en la semana próxima. Así se había acordado en el momento en que el SEOM levantó la medida de fuerza que realizó a mediados de mes, al aceptar un incremento del 32% a pagar sobre la base de los salarios de diciembre. Al parecer, algunos delegados expresaron que esa "letra chica" del acuerdo (el desdoblamiento) no había sido explicitada de manera adecuada a las bases y que muchos municipales se enteraron que no cobrarían la totalidad del sueldo este jueves por la información publicada por RAFAELA NOTICIAS.
Más que el hecho de cobrar una parte mínima del sueldo con alguna demora (el Ejecutivo dijo que pagará la semana próxima el saldo restante, aunque tiene tiempo para hacerlo hasta el 10 de marzo), a los municipales les preocupa la señal que esto implica, en cuanto a las dificultades que tiene en caja el municipio para enfrentar sus obligaciones más urgentes, como son los sueldos. En realidad, eso obedece principalmente a que enero y febrero son históricamente los meses de menor recaudación. Las noticias de ajuste permanente que bajan de Nación y Provincia son las que agregan incertidumbre a muchos trabajadores municipales.
A eso se le suma la confusión que genera la negociación que por su lado encara la FESTRAM. Por eso el SEOM comenzó a hacer circular entre los delegados y la base de trabajadores un cuadro comparativo, con números de sueldos según categoría, de lo logrado por unos y otros en la negociación con las patronales. La contraofensiva de la FESTRAM fue en otra dirección: reclama al Ejecutivo rafaelino que pague una diferencia del orden del 6% en la liquidación de la segunda cuota del medio aguinaldo de 2023, alegando su propio acuerdo paritario a nivel provincial.
La pulseada promete continuar.
