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Mons. Pedro Torres: "Mamá Antula nos invita a seguir su ejemplo de entrega y devoción"

La primera Santa Argentina será canonizada el domingo 11 de febrero en la Basílica de San Pedro (5.30 hs Argentina). "Es el amor encarnado en el servicio y la entrega lo que realmente transforma al mundo".
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Monseñor Pedro Torres Crédito: Rafaela Noticias
Redacción Rafaela Noticias

Por Redacción Rafaela Noticias

El domingo 11 de febrero, en la Basílica de San Pedro, se llevará a cabo la canonización de María Antonia de Paz y Figueroa, una laica consagrada y ferviente promotora de la obra ignaciana durante los tiempos coloniales prerrevolucionarios. Este acontecimiento histórico se produce tras el reconocimiento de un milagro atribuido a su intercesión el pasado mes de octubre.

En una conversación con el Obispo de la Diócesis de Rafaela, Monseñor Pedro Torres, compartió a Rafaela Noticia Radio FM 100.7 sus reflexiones sobre la figura inspiradora de Mamá Antula, también conocida como María Antonia de San José. Con una pasión palpable, Monseñor Torres relató la vida extraordinaria de esta mujer, cuya devoción y entrega dejaron una huella indeleble en la historia espiritual de Argentina.

"Mamá Antula, que en realidad era María Antonia de San José, era una santiagueña de una calidad humana y un corazón tan lleno de caridad que impresionaba a todos los que la conocían", expresó Monseñor Torres al comenzar nuestra conversación. "Nació alrededor de 1730-1733 en un pequeño pueblo cerca de Santiago. Desde temprana edad, se sintió atraída hacia la comunidad jesuita que ejercía una fuerte presencia en la región".

Crucifijo tallado por los indígenas que llevó la Beata Mama Antula en sus viajes como misionera de los Ejercicios Espirituales
Crucifijo tallado por los indígenas que llevó la Beata Mama Antula en sus viajes como misionera de los Ejercicios Espirituales

La expulsión de los jesuitas marcó un momento crucial en la vida de Mamá Antula. Ante la preocupación de que se perdiera la experiencia de los ejercicios espirituales, asumió valientemente la misión de difundirlos por todo el país. "Con un grupo de amigas, pero liderando de manera formidable, Mamá Antula comenzó a organizar y dirigir los ejercicios espirituales. Vestida con un hábito jesuita, descalza y con un carrito, recorrió incansablemente el país, desde Jujuy hasta Buenos Aires, enfrentando desafíos físicos y adversidades con una determinación inquebrantable".

Monseñor Torres destacó el impacto duradero de Mamá Antula en la sociedad argentina de su época. "Organizó cientos de tandas de ejercicios espirituales, incluso en situaciones precarias. Su devoción y enseñanzas llegaron a rincones remotos del mundo, alimentando el espíritu de aquellos que anhelaban un encuentro más profundo con Dios".

La construcción de la Casa de Ejercicios en Buenos Aires y su invitación a Uruguay son testimonios de su compromiso con la fe y su deseo de compartir esa experiencia transformadora con otros. "Mamá Antula no solo inspiró a los próceres de nuestra patria, sino que también dejó un legado de esperanza y renovación espiritual que perdura hasta nuestros días", subrayó Monseñor Torres.

medalla y cruz de su Santo Rosario, encontrados recientemente. La imagen de la Virgen de los Dolores, la “Abadesa” de la Santa Casa, signos de su devoción Mariana
medalla y cruz de su Santo Rosario, encontrados recientemente. La imagen de la Virgen de los Dolores, la “Abadesa” de la Santa Casa, signos de su devoción Mariana

El obispo cordobés no escatimó en elogios al recordar la profunda conexión de Mamá Antula con San José, copatrono con la Virgen de Guadalupe de la diócesis de Rafaela. "Su dedicación a celebrar misas para el retorno de los jesuitas muestra su compromiso con sanar las heridas sociales y religiosas de su tiempo. Su incansable labor misionera y su firme creencia en el poder del amor divino la convierten en un faro de esperanza en medio de la adversidad".

Cabe destacar que la influencia de Mamá Antula trascendió su tiempo y espacio. Monseñor Torres compartió una anécdota reveladora: "La visita del Cura Brochero a la casa de ejercicios de Mamá Antula en Buenos Aires refleja la reverencia y el interés que suscitó su labor entre los santos argentinos. Brochero, con la misma inspiración, buscó aprender de ella y consultó su experiencia antes de iniciar su propia obra en Traslasierra". Esta interacción entre dos figuras prominentes de la fe argentina resalta la importancia y el impacto duradero de la labor de María Antonia de Paz y Figueroa en la historia religiosa del país.

Manuscrito con los puntos de las meditaciones de los Ejercicios Espirituales que se daban en la Santa Casa
Manuscrito con los puntos de las meditaciones de los Ejercicios Espirituales que se daban en la Santa Casa

Su profunda conexión espiritual con Jesucristo quedó patente en sus palabras y acciones. Como relató Monseñor Pedro Torres, "María Antonia de Paz y Figueroa tenía una devoción particular hacia Jesús, a quien cariñosamente llamaba 'Manuelito'". Esta expresión de intimidad y confianza refleja su entrega total a la fe y su compromiso con la difusión del mensaje cristiano en su entorno.

Además, María Antonia de Paz y Figueroa llevaban consigo una cruz, que no solo era un símbolo de su fe, sino también un instrumento de inspiración y consuelo para quienes la rodeaban. Monseñor Torres añade: "Se cuenta que cuando le hacían reverencia a ella, Mamá Antula hacía besar la cruz que llevaba consigo". Este gesto de humildad y generosidad evidencia su deseo de compartir la gracia y la bendición que se encontraba en su fe con aquellos que la rodeaban.

El “Manuelito” que llevaba colgado a su cuello, su reliquia más querida
El “Manuelito” que llevaba colgado a su cuello, su reliquia más querida

También es notable el hecho de que María Antonia de Paz y Figueroa utilizaba un bastón, que se convirtió en un símbolo de su labor misionera y su dedicación a la causa de los ejercicios espirituales. Monseñor Torres nos recordó: "Un crucifijo de las misiones servía como su bastón, una herramienta que la acompañaba en su incansable labor de difundir la fe y consolar a los necesitados". Este bastón, además de ser un apoyo físico, simboliza su compromiso con seguir los pasos de Jesucristo y llevar el mensaje del Evangelio a todos los rincones.

Su báculo o bastón de peregrina, andando y haciendo camino
Su báculo o bastón de peregrina, andando y haciendo camino

Además de su rica trayectoria, Monseñor Pedro Torres compartió un detalle conmovedor sobre el proceso de canonización de Mamá Antula, un proceso marcado por señales divinas que asombran y reconfortan a quienes creemos en su causa.

"El milagro que abrió la puerta a la canonización de Mamá Antula ocurrió 24 de octubre del 2023 en Santa Fe. Una familia entera, en un momento de desesperación ante un diagnóstico terminal, recurrió a la intercesión de Mamá Antula mediante sus fervientes oraciones".

El resultado de esta fe inquebrantable fue un verdadero milagro. "El beneficiado, Claudio Perusini, después de haber estado 28 días en estado vegetativo, se recuperó milagrosamente", compartió Monseñor Torres. "Esos son signos que Dios nos regala en el momento oportuno, recordándonos su presencia constante en nuestras vidas".

Monseñor Torres relacionó este evento con la experiencia personal de su familia en relación con el proceso de canonización del Cura Brochero. "Mi papá y mis abuelos anhelaban la canonización de Brochero, pero nunca imaginaron que se viviría bajo el pontificado de un Papa argentino", reflexionó. "Dios conoce el tiempo oportuno para concedernos estos signos de esperanza y fortaleza en nuestra fe".

Huesitos sagrados del cuerpo de la Beata, la suela de sus sandalias y el algarrobo de su tumba: reliquias de una mujer que entregó su vida por amor a una misión
Huesitos sagrados del cuerpo de la Beata, la suela de sus sandalias y el algarrobo de su tumba: reliquias de una mujer que entregó su vida por amor a una misión

Con estas palabras, Monseñor Pedro Torres nos insta a seguir el ejemplo de Mamá Antula, caminando descalzos en pos de las huellas de Jesucristo:

Su próxima canonización nos recuerda que, a pesar de las adversidades, debemos mantenernos firmes en nuestra fe, confiando en que el amor y la esperanza de Dios llenarán nuestros corazones de alegría y consuelo

Monseñor Pedro Torres

En un giro de la conversación hacia la valoración del rol de la mujer en la sociedad y la Iglesia, Monseñor Pedro Torres profundizó en la importancia de reconocer el impacto significativo que las mujeres han tenido a lo largo de la historia, incluyendo figuras notables como Mamá Antula.

"Es fundamental reconocer el papel de la mujer en la historia y en la vida de nuestra Patria", afirmó Monseñor Torres. "Mamá Antula no estuvo sola en su misión; contó con un grupo de amigas que la acompañaron y apoyaron en su labor. Como dijo Teresa de Jesús, 'nadie va al cielo solo', y esto resalta la importancia de vivir la santidad de manera comunitaria".

Mamá Antula y
Mamá Antula y "Manuelito"

El obispo destacó que Mamá Antula fue una pionera en su tiempo, desafiando las normas sociales y religiosas para llevar a cabo su obra. "Aunque existen otras beatas argentinas, ninguna nació en la misma época que Mamá Antula. Su valentía y determinación son un testimonio poderoso del genio femenino y de la capacidad de las mujeres para influir positivamente en la sociedad y en la Iglesia".

Candelabro, caldero y campana, que utilizaba la Beata, para dar luz, calor e invitar a la oración en las tandas de retiros
Candelabro, caldero y campana, que utilizaba la Beata, para dar luz, calor e invitar a la oración en las tandas de retiros

Monseñor Torres también enfatizó la necesidad de redescubrir y valorar la dignidad y el papel único de la mujer en la sociedad contemporánea. "En un mundo marcado por la violencia y las heridas, la dimensión de la delicadeza y la ternura femenina es esencial", señaló. "La figura de Mamá Antula, conocida cariñosamente como 'mamá', nos recuerda que la Iglesia es madre y que la maternidad es un aspecto fundamental de la fe cristiana".

El obispo recordó las palabras de Juan Pablo II sobre la dignidad de la mujer y el llamado a potenciar el genio femenino en el servicio y el amor. "Es el amor encarnado en el servicio y la entrega lo que realmente transforma al mundo. Necesitamos el genio femenino en este tercer milenio para encontrar soluciones a los desafíos actuales y edificar un futuro basado en el amor y la solidaridad".

Monseñor Pedro Torres compartió detalles importantes sobre la próxima ceremonia de canonización de Mamá Antula:

"La misa de canonización está programada para el próximo domingo 11 de febrero en la Basílica de San Pedro, a las 5:30 de la mañana, y será transmitida por varios medios argentinos, gracias a Dios", anunció Monseñor Torres con gratitud. "Ya se ha instalado la imagen oficial de Mamá Antula en su honor, y he visto en las redes sociales que unos 300 peregrinos provenientes de Santiago y Buenos Aires han sido recibidos por el Papa".

El obispo luego abordó el encuentro entre el Papa Francisco y el líder político Milei, destacando la importancia del diálogo y la búsqueda del bien común en un país caracterizado por tensiones y divisiones. "Es esencial superar las crispaciones y construir un camino hacia adelante", afirmó Monseñor Torres. "Espero que este encuentro entre el Papa y Milei sea fructífero para nuestro país".

Monseñor Torres también recordó la coincidencia del día de la canonización con la jornada mundial de oración por los enfermos, "el domingo también es el día de la Virgen de Lourdes, que cuida particularmente a los enfermos" y destacó la importancia de la sanación tanto física como espiritual. "Que la canonización sea un bálsamo para todos, llenando nuestros corazones de la paz de Dios que trasciende cualquier circunstancia", expresó el obispo.

Con estas palabras, Monseñor Pedro Torres nos invita a contemplar la canonización de Mamá Antula no solo como un evento histórico, sino también como un momento de reflexión, sanación y esperanza para Argentina y el mundo entero.

La imagen del Niño Dios recostado en una cruz, que besaban los ejercitantes al concluir sus Ejercicios
La imagen del Niño Dios recostado en una cruz, que besaban los ejercitantes al concluir sus Ejercicios

Monseñor Torres concluyó nuestra conversación con un llamado a la reflexión y la acción. "Mamá Antula nos recuerda que el camino hacia la plenitud espiritual está abierto para todos. Su ejemplo nos insta a abrir nuestros corazones al amor de Dios y a seguir su ejemplo de entrega y devoción. Que su legado nos guíe en este nuevo milenio hacia un encuentro más profundo con la fe y la esperanza".

Monseñor Pedro Torres Mama Antula Papa Francisco

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