En una sentencia dictada por el Tribunal Oral Federal de Santa Fe, Alejandro Ezequiel Vargas (37), oriundo de Jujuy, y Gustavo Abelardo Estrada (34), de Salta, fueron condenados a un año y seis meses de prisión efectiva e inhabilitación para ejercer el comercio por el término de seis meses. En el caso de Estrada, unificaron otra condena del año 2021 impuesta por el tribunal oral en lo criminal federal de Salta N° 1, en la pena única de tres años de prisión efectiva e inhabilitación especial para ejercer el comercio por el término de seis meses.
Además, les impusieron cubrir las costas del juicio a los condenados y en consecuencia al pago de la tasa de justicia, que asciende a la suma de mil quinientos pesos ($ 1.500).
El hecho
El jueves 16 de marzo de 2023, en un control vial efectuado sobre el kilómetro 224 de la Ruta Nacional N° 34, integrantes de la Sección Seguridad Vial "Rafaela" de Gendarmería Nacional detuvieron la marcha de un transporte de cargas generales procedente de la ciudad salteña de Tartagal con destino final la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el cual trasladaba postes de quebracho.
Los uniformados fueron alertados por un intenso olor característico a hojas de coca, observando bolsas tipo arpillera sobre la carga y en el sector delantero de la misma, por lo que se dio intervención al Juzgado Federal de Rafaela.
Consecuentemente, en presencia de testigos, los funcionarios contabilizaron 30 bultos que contenían 25 kilos cada uno de hojas de coca en estado natural, totalizando 750 kilos.
Los gendarmes decomisaron el vegetal y detuvieron al conductor del camión por presunta infracción a la Ley 23.737, como así también a un ciudadano, quien sería el propietario del estupefaciente y conducía un vehículo Gol Trend alertando sobre posibles controles.
En cuanto a las fundamentaciones de la sentencia, entre otras cosas, sostuvieron que no existieron elementos de juicio que permitan sostener que los imputados tuvieron como objetivo transportar las hojas de coca secuestradas para la posterior elaboración o fabricación de estupefaciente. Por lo que, ambas partes, acordaron el “encubrimiento de contrabando”.
