Matías Edery, fiscal de Rosario, fue imputado este viernes en el marco de la causa que se inició luego de que trascendieran públicamente conversaciones que mantenía con una testaferro de Los Monos.

De acuerdo a lo informado por la Fiscalía Regional 1, a Edery se le atribuyó la autoría de conductas que fueron calificadas como omisión de investigar en reiteradas oportunidades; encubrimiento agravado; violación de medios de prueba y prevaricato en reiteradas oportunidades.

Los hechos endilgados tuvieron lugar en el período comprendido entre julio de 2019 y setiembre de 2023.

Así, se atribuyó haber dejado de promover la persecución penal de diversas personas, a sabiendas de que existían elementos que acreditaban su participación en hechos ilícitos vinculados a organizaciones criminales; haber alterado rastros de hechos delictivos con el fin de asegurar la impunidad de dichas personas; y haber asesorado a partes contrarias en un mismo juicio, en forma simultánea, actuando y velando por los intereses del imputado y perjudicando deliberadamente las causas que tenía confiadas en función de su cargo de fiscal.

Las fiscales de la Unidad de Delitos Complejos y Violencia Institucional, Laura Urquiza y Bárbara Ilera –encargadas de realizar la atribución imputativa al fiscal Edery– indicaron que la investigación se encuentra en pleno desarrollo.

Asimismo, señalaron que restan llevar a cabo numerosas diligencias y el análisis de la abundante evidencia que se incorpora a la causa.

El caso

Los polémicos chats fueron expuestos en una audiencia realizada en el Centro de Justicia Penal de Rosario, en la que los fiscales Pablo Socca y Miguel Moreno expusieron una serie de conversaciones por WhatsApp entre su par Edery y Mariana Ortigala, quien fue testigo de la causa Alvarado y recientemente fue detenida como testaferro de Los Monos.

Los chats fueron advertidos en el marco de la causa que investiga una serie de extorsiones al dueño de las agencias de quiniela de Rosario, El Califa, al cual Los Monos le exigieron más de un millón de dólares a cambio de recibir protección. Como el propietario se negó a pagar, los extorsionadores atentaron contra distintas quinielas.

Harto de la situación, el empresario rosarino acudió a la Justicia y a partir de allí se inició una causa judicial que destapó un engranaje criminal que terminó con varios hombres y mujeres detenidas e imputadas. Entre ellas, Ortigala y Mariana Córdoba, la viuda de David Perona, el capitalista del juego clandestino de Rafaela que falleció en época de pandemia.

En tanto, el gobernador Maximiliano Pullaro se manifestó públicamente sobre la imputación a Edery: “Para mí el fiscal Edery es uno de los mejores fiscales”, dijo el actual mandatario santafesino en una rueda de prensa realizada en la ciudad de Santa Fe. Según Pullaro, Edery es un “fiscal valiente” porque detuvo a las principales organizaciones criminales que operaban en Rosario y zonas de influencia. “Estuvo en las principales investigaciones contra las organizaciones criminales que tuvo la provincia de Santa Fe”, dijo el gobernador.

El titular de la Casa Gris también valoró al fiscal que denunció a Edery, Pablo Socco. “Es un buen fiscal, no quiero entrar en una diferencia del MPA de Rosario”, sostuvo y concluyó con que la imputación positiva, ya que permitirá saber qué evidencias tienen las fiscales para acusar a su par rosarino.

“Es saludable porque va a mostrar cuáles son los elementos que entienden los fiscales para imputarlo a Edery y él tendrá toda la posibilidad de defenderse”, sostuvo el gobernador santafesino. “Va a traer luz y eso es lo bueno de este sistema”, destacó.