En las últimas horas, las panaderías de Rafaela aplicaron un nuevo aumento en el precio del kilo de pan, elevándolo desde los $1.100 iniciales hasta alcanzar los actuales $1.600. Este incremento, que se suma a ajustes previos, refleja las presiones económicas que enfrentan los panaderos, quienes experimentaron alzas de entre un 30% y hasta un 80% en los costos de insumos esenciales.
Impacto de los aumentos en los insumos:
La harina, componente fundamental en la producción de pan, experimentó un incremento considerable. Los 25 kg de harina 0000, que anteriormente costaban $8.500, ahora se sitúan en $12.500. Esta situación pone de manifiesto la dificultad que enfrentan las panaderías para mantener precios accesibles, especialmente cuando no todas las harinas reciben subsidios.
Entre los insumos que más impactaron en el aumento de costos se encuentran los lácteos, como la manteca y la margarina, que han experimentado alzas significativas. Además, el dulce de leche registró un incremento del 50%, mientras que otros insumos subieron en torno al 30% o incluso más.
Impacto en el comportamiento del consumidor:
Ante esta realidad económica, los consumidores se enfrentan a un panorama desafiante. La incertidumbre económica llevó a una disminución en la demanda, ya que los compradores se muestran más cautelosos, cuestionando los precios y comparando entre diferentes opciones.
Competencia desleal y calidad del producto:
Además de los aumentos en los costos de insumos, las panaderías se enfrentan a la competencia desleal de aquellos que elaboran productos en sus hogares y los venden a precios más bajos. Estos productores informales eluden impuestos y costos laborales, lo que les permite ofrecer precios más atractivos. Sin embargo, este escenario plantea la preocupación sobre la calidad de los productos, que podría verse comprometida.
Perspectivas futuras:
Las panaderías consultadas expresaron su preocupación sobre el futuro, anticipando que la situación podría empeorar. La combinación de aumentos constantes en los costos de insumos y la competencia desleal plantea un escenario difícil para el sector.
