Por la caída del poder adquisitivo, el consumo de carne vacuna cayó 17,6% en el primer trimestre del año en comparación al mismo período de 2023. Se trata del registro más bajo de las últimas tres décadas, según un informe de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes (Ciccra).
En detalle, el consumo aparente de carne vacuna habría totalizado 499,7 mil toneladas res con hueso entre enero y marzo. En tanto que el consumo per cápita fue equivalente a 42,6 kilos/año el mes pasado, ubicándose 18,5% por debajo de marzo de 2023.
Pese a estos datos, en Santa Fe se muestran esperanzados desde el sector. "La carne en la ciudad de Santa Fe es tan buena como en el resto del país. Muchas veces en las Cámaras discuto que el stock ganadero que tiene el país es el justo y necesario. Este es un negocio cristalino de oferta y demanda. Si no hubiese la cantidad que hay, no podríamos abastecer a los argentinos", expresó Antonio D´Angelo, integrante de la Cámara de Frigoríficos de Santa Fe, en diálogo con Radio Mitre Santa Fe.
El productor santafesino aseguró que "el kilo de carne decimos que es caro pero cuando lo llevas a la mesa sigue siendo lo más barato. La carne es una comida popular y que debería estar más barata. Yo no creo que la carne esté cara en relación a otros precios".
"Si comparo con otros servicios y alimentos, la carne está re barata. Entiendo que el bolsillo está flaco y no alcanza, pero no está cara la carne", afirmó. En ese sentido se preguntó: "¿La carne puede bajar? Esto es oferta y demanda y la demanda está sostenida. A pesar de que los supermercados y demás, acusan una caída del 20%, las cabezas faenadas en el país sólo cayeron un 10% producto de la importación".
