A tres días de haber asumido la intendencia de Santo Tomé, Miguel Weiss Ackerley apuntó contra la última gestión al criticar el estado de abandono de la vecina ciudad. Para el actual intendente, se llegó a un límite.
En diálogo con Radio Mitre Santa Fe, Weiss Ackerley se refirió a la situación hídrica que enfrenta Santo Tomé: "Había pronósticos de la llegada de este fenómeno y en Santo Tomé no se hicieron las acciones para mitigar los efectos adversos de este fenómeno en una ciudad de casi 100 mil habitantes y que tiene una íntima relación con río Salado". En ese marco agregó que están "haciendo una mejora y llevar acciones a contrarreloj para mejorar el sistema de bombeo y controlar la defensa de la ciudad".
Weiss Ackerley recalcó que "no me lleve ninguna sorpresa porque había cosas que señalamos a la gestión municipal y provincial anterior. No se puso énfasis a una ciudad de importancia y donde no se han hecho las acciones que se deberían haber hecho con recursos propios".
Por otro lado fue consultado acerca del transporte, a quien en enero se recortan los subsidios. En ese sentido, Weiss Ackerley sostuvo que "en Santo Tomé nunca tuvimos injerencia en el transporte público porque es interurbano. De todas maneras el transporte público es un servicio que nos interesa tenerlo resguardado porque lo utilizan gente para ir a su trabajo o para ir a estudiar".
Asimismo habló de la crítica situación de la ciudad donde enfatizó que "además de lo que uno percibe de la ciudad, de un estado deplorable, de abandono, de suciedad, hay una carencia en los servicios públicos muy notoria. Nos comprometidos a ordenar y emprolijar Santo Tomé porque sabemos que el año próximo no vamos a poder ejecutar grandes obras".
"Acá el lunes había un camión y medio funcionando, y en estos días hemos tratado de ir mejorando. Vemos que a varios elementos de trabajo lo llevaron al límite de la vida útil y muchos de ellos tienen que reemplazarse por algo nuevo pero no hay plata", concluyó.
